sábado, 29 de diciembre de 2007

Vacío color de rata

Pie de foto: La A-67 a tientas.
Foto: Soledad.

El cielo no existe, los caminos, los árboles, las casas, tampoco; el gris lo invade todo; estoy en tierra de nadie, en la nada. La niebla me rodea, me aísla, parece como si me ayudara a no tener que pensar en las penitencias a las que vuelvo después de tres días de escapada. Al mismo tiempo que la flecha de luz de los faros del coche, con su punta afilada, me va abriendo camino rasgando la niebla en jirones, los lobos con alzacuello y piel de cordero místico aúllan desde sus púlpitos callejeros a una concentración de ovejas con pieles de visón y laca de derechas, de toda la vida, en el pelo; mas abajo, atravesando el suelo, en el anden del metro, un salvaje de cerebro rapado patea la cara morena del exilio; la violencia, con gorra de película yanqui, se pavonea luciendo su cola de bates de béisbol; y la rutina atesta los andenes, encadenada a los pies de los que todos los días duermen su cansancio apoyando la cabeza en las paredes de los vagones decorados con trayectos de frustración. El tren que hace el trayecto de la línea de coca se ha parado y no puede salir del túnel; las agujas de las jeringuillas ensartan guiñapos como si fueran mariposas. Pero todo se desdibuja en mi mente y se convierte en siluetas sugeridas por la niebla. Los aburridos soliloquios de los políticos con su propio ombligo, son ecos lejanos, que acompañan a los de los periodistas mercenarios, que también convierten a sus ombligos, de grandes bolsillos insaciables, en estrellas de tertulia radiofónica y que, en la estepa difuminada en gris de carboncillo, a ciento veinte kilómetros por hora y dos puntos rojos delante como única referencia, pierden la señal, dejando solo en mi cerebro el siseo lejano de las lenguas viperinas.
Escudriño tenso el vacío color de rata y me imagino la proa de un barco fantasma que de repente surge, melancólica, encallada en el asfalto. Pero solo lo imagino y mis manos, agarradas al volante, se relajan . Entre tanto la niebla a mi alrededor se cierra, se hace mas impenetrable y convierte en jirones mis propios fantasmas.

lunes, 24 de diciembre de 2007

El mecanismo de las olas

Pie de foto: Marejada este Otoño en Llanes, Asturias. Foto: Tuxi (http://llanesnet.com/)
Me gusta caminar por la línea de alambre del horizonte como un funanbulista. Observar, como un voyeur, a las nubes bajas copulando con la mar esmeralda y escuchar el eco de sus gemidos rebotando sobre las paredes nacaradas de las caracolas. El desembarco de las olas en la playa deja restos de ocle agonizante y las rocas, acostumbradas, ni se inmutan; los restos de espuma germinan de sal la arena suave, y algún palo esquelético, arrastrado por la marea, besa la tierra firme como un naufrago.
A mi espalda , el monte entorna los ojos para ver el atardecer que tiñe de cobre el mar y yo, diminuto, me balanceo en el alambre.

viernes, 21 de diciembre de 2007

Canon el Bárbaro

B.B.King, Springsteen, Beatles, Dylan, Van Morrison, Neil Young, Led Zeppelin, Rolling Stones, Rem, Serrat, Luz Casal, Koko Taylor, Taj Mahal, Camarón, Tete Montoliu, Metallica, Pat Metheny, Jackson Browne, James Taylor, Alanis Morissettte, West Montgomery, Sabina, Ben Harper, Ramones, Otis Reading, Norah Jones, Yo-Yo Ma, Nirvana, Sonny Rollins, Radio Head, John Coltrane, Antonio Vega, Mile Davis, The Doors, Charlie Haden, Lou Red, Ry Cooder, Vinicius de Moraes, Michel Camilo, Muddy Waters, Sting, Tangerine Dream, Eric Clapton, Johny Cash, St. Germain, Ismael Lo, U2, Fito, The Cure, Jimi Hendrix…son autores de creaciones que merecen ser valoradas... pero, igual que me niego a colaborar con mis impuestos directos al sostenimiento de la Iglesia, me niego a contribuir para el sostenimiento de Ramoncín, “El Rey del pollo frito”, con mis impuestos indirectos.

P.S. Este post tiene continuación en los comentarios.

Ilustración: Manel Fontdevila en Público

lunes, 17 de diciembre de 2007

Antes muertos que sencillos

El juez Bermúdez es el último magistrado en apuntarse al gusto por los focos; después del libro escrito por su mujer, de su brillante actuación en el juicio del 11-M solo queda el brillo de su calva fashion, centelleando como el de una lentejuela. Por supuesto sus corporativos colegas de la Inspección del Consejo General del Poder Judicial no ven nada sancionable en el hecho de que, en dicho libro, se vulneren los derechos a la intimidad mas elementales de los familiares de las víctimas. En el fondo, a los miembros del Consejo les pasa que se mueren por imprimir también las palmas de sus “justas” manos, a cualquier precio, en el cemento fresco del paseo de la fama.
Dicen que Moisés, en realidad, del monte bajaba tres tablas de la ley, pero que tropezó, una se le cayó al suelo y se le rompió; para salir del apuro, a sus acólitos les dijo que Dios solo le había entregado dos.

Así ha sido siempre la Justicia: un cachondeo.

Ilustración: Gallego & Rey en El Mundo

jueves, 6 de diciembre de 2007

La voz del río

Nos largamos de clase
Teníamos que escapar de aquellos idiotas
Habíamos aprendido más con un disco de tres minutos
Nena, que con todo lo que nos enseñaban en la escuela...
Bruce Springsteen.
(No surrender, Born in the U.S.A 1984)



Mientras a miles de kilómetros ideológicos de distancia, las espuelas de las botas de cowboy de su enemigo dejan dos cicatrices encima de la mesa del “despacho oval”, aquí, en el escenario, sus dedos se deslizan por el mástil de la guitarra dejando rastros de grasa de Cadillac en los acordes de Radio nowhere , el primer sencillo de su último trabajo Majic.
Springsteen es un chopo frondoso, que cambió las riveras de The river por el escenario para echar raíces; ha empezado su otoño, de sus ramas empiezan a caer las hojas ocres; ya no es el mismo y la E Street Band tampoco, achaques varios han atrofiado un poco a la banda, en el concierto de Madrid hubo notas desafinadas y entradas a destiempo; el “Jefe” no corre y salta como antes, incluso parece como si a su inquebrantable sentido del humor también le empezaran a pesar los cincuenta y ocho; o será tal vez que las agujas de su reloj se han cansado de haber nacido para correr sobre "un tiempo donde las mentiras son la verdad, y la verdad es mentira", según dijo Springsteen en castellano, con los primeros acordes de Magic susurrando de fondo acariciados por una mandolina.

Magic (Tema a tema)

Radio nowhere. Tema guitarrero made in Bruce que no sorprende, pero con la potencia suficiente para hacernos permanecer expectantes.
You´ll be comin´down. Bueno… a ver la siguiente.
Livin´in the future. Ummm…¿A que me suena?.
Worst enemy. Me la creo, sigo expectante.
Gipsy biker. La banda sonora de los susurros de Brando en Apocalypse Now.
Girls in their summer ciothes. "The Boss" nos quiere de una manera inocente y es imposible no abrazarle.

I´ll work for your love. Una dedo de la armónica deslizándose suavemente por la espalda del piano que nos arrulla.
Magic. El fantasma de Tom Joad vuelve a materializarse y con ruidos de cadenas.
Last to die. ¡NO A LA GUERRA!. Bush odia estas canciones, a nosotros nos ponen las pilas.
Long walk home. Springsteen vuelve a enseñarnos sus álbunes de fotos familiares.
Devil´s arcade. Épica en vena.
Terry´s song. Esquela musical. Los amigos de Bruce son nuestros amigos.

En resumen, el río todavía serpentea sinuoso arrastrando canciones; al irregular crespón de luto del 11-S The Rising le sucede un álbum sincero: Devils & Dust, un derroche de folk intimo que conmueve la entraña y que ha dado paso a este último, por ahora, Magic que nos suena a eco rebobinado.
Bush por fin se larga, pero sus espuelas también dejan cicatrices en los costados del gran jefe “White Horse”.


Ilustración: Jasper Jhons, Three flags (1958)

sábado, 1 de diciembre de 2007

Agudeza visual

¿Alguien le ha visto alguna vez los dientes a Rajoy?, ¿habrá perdido, también, su dentadura postiza?